lunes, 8 de septiembre de 2014

Relativa felicidad


Llega un momento en el que me veo libre. 
Libre para amar, para salir, para disfrutar, para reír, para llorar..
Pero aún sigues ahí.
Lamentablemente estarás ahí por el resto de mi vida.
Como esa espina en el zapato que no puedes sacar.
¡Me encantaría poder borrarte! ¡Eliminarte por siempre!
Ser feliz realmente.

Debo tragar mi rabia y mi odio.
Hacer como si nada pasa, como si a mi no me importa.
Pero ¡no quiero verte!
Ni siquiera hablarte o responder tus mensajes.

Que ya de nada sirven
Que para nada importan

¿Y si me voy?
¿Si me alejo de todo?
A un lugar que no puedas encontrarme
que no puedas verme ni hablarme.
Sola, yo y mi pequeña.

Tú, fuera de nosotras.
Que tanto daño me hiciste, 
tanto dolor causaste
y crees que es justo disfrutar de algo tan maravilloso
Podría tomar cartas en el asunto
Alejarte de nuestras vidas para siempre.

Y punto!

No hay comentarios: