martes, 16 de junio de 2009

Hundida en la soledad!





Cuando notas que te hundes, que estás cansado y no resistirás más.. tu cuerpo tiembla compulsivamente, las palabras se convierten en sollozos y las lágrimas no te dejan ver con claridad.


Buscas un sitio donde dejarte caer.. Te desplomas en la cama, abrazando a la almohada.. Tal como un náufrago debe aferrarse a un trozo de madera.


Sientes como estás cada vez más aislada del mundo, casi no puedes oir lo que ocurre a tu alrededor, solo tus pensamientos retumban en tu mente, oscuros y confusos. Una presión en el pecho que no te deja coger aire.. respiras de una manera entre cortada.


Todo pierde sentido, tu corazón se vuelve arritmico tan pronto como se acelera, haciéndote creer que va a estallar.. pero se tranquiliza hasta el punto de quedar parado.


Es el fin del mundo, nada vale la pena, el deseo de desaparecer se hace cada vez más fuerte y más palpable la necesidad de que todo cambie.. Nadas en un mar de desesperanza y terminas ahogandote en tus propios problemas, la habitación se hace pequeña y las paredes terminan aplastándote.


Te asfixias y tu voz quebrada iama a gritos a tu valentía.. tu coraje es lo unico que te ayudaría a vencer este pánico, gritos silenciados por tu propio temor, ese miedo que no sabes de donde viene, no sabes a que, ni por qué.. pero es un sentimiento que te paraliza..


La soledad crea una herida sangrante!


Poco a poco la oscuridad se apodera de la habitación dejándote en penumbra.. El llanto es desolador, se diría que no vas a parar de llorar, que morirás deshidratada o por tristeza.. los ojos se te van cerrando y el sueño te va venciendo.


El sueño llega y duermes tranquila, has llegado al mundo de los sueños..


Como llegar a la isla tras el naufragio..